Con más de 300 000 habitantes, Cluj Napoca es la tercera ciudad más poblada de Rumanía, por detrás de Bucarest y Iasi. Ubicada al noroeste del país, es la antigua capital de Transilvania y un centro cultural e industrial muy importante.
Situada en los Balcanes, la ciudad refleja la peligrosidad de los nacionalismos y la importancia del mestizaje. Se hablan en ella tres idiomas: rumano, húngaro y alemán. Esta localidad es un magnífico exponente de cómo la interacción de pueblos sucesivos, como el romano, el dacio, el húngaro, el eslavo, el germánico, el zíngaro y, por supuesto, el rumano, se pueden fusionar para crear algo superior en torno a la convivencia, la creación y el desarrollo.
Quizás por ello, Cluj Napoca es actualmente un crisol cultural con un animado programa de festivales musicales, un precioso centro histórico, multitud de galerías y museos, y una vida nocturna juvenil y muy alegre. Es, en definitiva, un destino que combina diversión y aprendizaje, modernidad y tradición.
Debido a su capitalidad histórica de Transilvania, Cluj Napoca cuenta con lugares de gran interés, como la estatua del rey húngaro Matthias Corvinus y la belleza gótica de la iglesia de San Miguel.
Cluj Napoca es, sin género de dudas, el centro musical de Rumanía. Ofrece eventos anuales como el festival de danza Untold en el mes de agosto y el Electric Castle en julio, que reúne algunas de las actuaciones más importantes del país.
Transilvania se encuentra plagada de maravillas. El castillo de Bran, la iglesia Biertan y el terapéutico spa volcánico de Covasna son visitas obligadas en esta población. Lo que te resultará más difícil de encontrar son los vampiros. Aunque, por si acaso, no muestres tu cuello a los desconocidos.
En Cluj Napoca debes visitar el palacio Banffy, que incorpora el imponente Museo Nacional de Arte, el Museo de Historia de Transilvania y la maravillosa Colección de Historia de Farmacia. Pasa una jornada inolvidable moviéndote entre piezas artístitas y belleza pretérita y actual.
Esta ciudad es verde, espaciosa y muy natural. Incluye magníficas atracciones como el Jardín Botánico Alexandru Borza y el Parque Etnográfico Romulus Vuia, donde podrás admirar bellas reconstrucciones de edificios medievales.
Las encantadoras calles empedradas y los sugerentes escaparates hacen del céntrico Museo Square uno de los destinos turísticos más afamados de la ciudad. En los meses de verano puedes comprar productos frescos, artesanías autóctonas y delicias rumanas en sus mercadillos exteriores. En invierno, este museo es el punto focal de uno de los mejores mercados navideños de Transilvania. Este espacio también cuenta con otras estructuras atractivas en su perímetro, como el Monasterio Franciscano, el Museo de Historia de Transilvania y la antigua ciudad Obelisco.
Los jardines botánicos de Cluj Napoca se encuentran al sur de la ciudad. El parque cuenta con 14 hectáreas y más de 10 000 plantas, tanto nativas como foráneas. A través de diferentes senderos y caminos nivelados podrás conocer las especies existentes en los jardines, por ejemplo, romanos y japoneses. Desde 2010 es uno de los monumentos nacionales de Rumanía, y cumple una importante función de enseñanza e investigación a través de la Universidad Babe-Bolyai. ¡No olvides subir a la torre de observación para admirar sus estupendas vistas!
El Museo de Etnografía de Transilvania, situado en el palacio Reduta, descubrirás los estilos de vida y las artesanías rurales rumanas, incluyendo herramientas, ropa y cerámica. Además, el Parque Etnográfico, junto al Bosque de Hoia, es un espacio exterior con granjas reconstruidas, iglesias e instalaciones del siglo XVII.
El Teatro Nacional Lucian Blaga es una sala de conciertos muy prestigiosa, famosa en todo el país por sus interpretaciones artísticas de calidad y su fascinante arquitectura. Es un teatro neobarroco inaugurado a principios del siglo XX, cuando la ciudad todavía formaba parte del imperio húngaro. Actualmente ofrece representaciones de Shakespeare, Kafka y Molière, así como leyendas regionales rumanas, por ejemplo de Vasile Alecsandri. Comparte edificio con la Ópera de Rumanía, por lo que es un auténtico referente cultural en la zona y el país. ¿No te apetece visitarlo?
Construido inicialmente en el siglo XV, el Bastión de Sastre formó parte de una enorme fortaleza defensiva construida frente a los invasores. Está ubicado en la esquina sureste de la ciudadela y debe su nombre a los artesanos que la protegieron, en su día. Después el lugar fue abandonado y se mantuvo en mal estado hasta 2007, cuando se restauró y pasó a ser utilizado como Centro de Cultura Urbana con galerías de arte, espacios expositivos y salas de conferencias muy diversas.
Las encantadoras calles empedradas y los sugerentes escaparates hacen del céntrico Museo Square uno de los destinos turísticos más afamados de la ciudad. En los meses de verano puedes comprar productos frescos, artesanías autóctonas y delicias rumanas en sus mercadillos exteriores. En invierno, este museo es el punto focal de uno de los mejores mercados navideños de Transilvania. Este espacio también cuenta con otras estructuras atractivas en su perímetro, como el Monasterio Franciscano, el Museo de Historia de Transilvania y la antigua ciudad Obelisco.
Los jardines botánicos de Cluj Napoca se encuentran al sur de la ciudad. El parque cuenta con 14 hectáreas y más de 10 000 plantas, tanto nativas como foráneas. A través de diferentes senderos y caminos nivelados podrás conocer las especies existentes en los jardines, por ejemplo, romanos y japoneses. Desde 2010 es uno de los monumentos nacionales de Rumanía, y cumple una importante función de enseñanza e investigación a través de la Universidad Babe-Bolyai. ¡No olvides subir a la torre de observación para admirar sus estupendas vistas!
El Museo de Etnografía de Transilvania, situado en el palacio Reduta, descubrirás los estilos de vida y las artesanías rurales rumanas, incluyendo herramientas, ropa y cerámica. Además, el Parque Etnográfico, junto al Bosque de Hoia, es un espacio exterior con granjas reconstruidas, iglesias e instalaciones del siglo XVII.
El Teatro Nacional Lucian Blaga es una sala de conciertos muy prestigiosa, famosa en todo el país por sus interpretaciones artísticas de calidad y su fascinante arquitectura. Es un teatro neobarroco inaugurado a principios del siglo XX, cuando la ciudad todavía formaba parte del imperio húngaro. Actualmente ofrece representaciones de Shakespeare, Kafka y Molière, así como leyendas regionales rumanas, por ejemplo de Vasile Alecsandri. Comparte edificio con la Ópera de Rumanía, por lo que es un auténtico referente cultural en la zona y el país. ¿No te apetece visitarlo?
Construido inicialmente en el siglo XV, el Bastión de Sastre formó parte de una enorme fortaleza defensiva construida frente a los invasores. Está ubicado en la esquina sureste de la ciudadela y debe su nombre a los artesanos que la protegieron, en su día. Después el lugar fue abandonado y se mantuvo en mal estado hasta 2007, cuando se restauró y pasó a ser utilizado como Centro de Cultura Urbana con galerías de arte, espacios expositivos y salas de conferencias muy diversas.
Cluj Napoca te ofrece espléndidas propuestas gastronómicas. Desde especialidades de pescado en Baracca hasta sushi gourmet en el restaurante Tokyo. Si te apetece iniciarte en la comida clásica de Transilvania, Casa Ardeleana es una elección ganadora. Te sugerimos vivamente degustar la sopa servida en panes ahuecados. Los platos más significativos son la col a la cluj, el guisado a la haiduc y el galuste cu prune. El precio de las comidas comienza alrededor de 15 o 20 RON.
Si quieres aprovechar tu estancia para asistir a un festival de música, el verano -entre junio y septiembre- es el mejor momento para viajar a Cluj Napoca. Por otra parte, la primavera y el otoño también son buenos momentos para explorar Transilvania.
El aeropuerto internacional de Cluj Napoca cuenta con buenas conexiones con Europa. Una vez en él, el autobús 5 te costará 5 RON y los taxis unos 20.
Hay conexiones ferroviarias de InterCity a Bucarest y otras ciudades rumanas. El viaje desde la capital hasta Cluj Napoca tarda 8 horas.
Para viajar desde Bucarest, toma la E81 y llegarás directamente a Cluj Napoca. Si te desplazas desde Timisoara, coge la A1 en dirección este y, después, cambia a la E81 en Sebes.
EuroBusWays, OrangeWays y Royal GTS conectan autobuses con esta ciudad desde Budapest y Bucarest.
1. Centru es la antigua ciudad de Cluj Napoca. Se encuentra repleta de cafés, galerías y hermosas iglesias, por lo que resulta un escenario impecable para sentirte tranquilo en un bonito entorno.
2. Manastur es una amplia zona residencial que alberga algunos de los mejores restaurantes de Cluj Napoca, entre ellos Casa Piratilor y Valahia.
3. Zorilor está ubicada en la mitad sur de la ciudad. En una zona estudiantil próspera, animada y muy divertida, en la cual encontrarás numerosos clubes y bares de actualidad.
Los autobuses RATUC cubren toda la ciudad a un coste razonable: 4 RON por viaje.
Los taxis no son una mala alternativa para moverte por la ciudad. La bajada de bandera inicial te costará 3,50 RON y, a continuación, cada 1,6 kilómetros tendrás que abonar 3,50 RON adicionales.
Las compañías de alquiler de vehículos más habituales en Cluj Napoca son Sixt y Auto Daya. Sus tarifas resultan altamente interesantes: 25 RON por día.
Si quieres comprar ropa barata, acude a los grandes centros comerciales del centro de Cluj Napoca. Entre ellos, Iulius Mall, Galeriile Ferdinand o Polus Center. También las calles que rodean la plaza Mihai Viteazu te ofrecen espléndidas alternativas comerciales.
Los supermercados Kaufland y Billa son los más populares y habituales en esta ciudad. Los precios, en general, están bastante bien. Así, abonarás 1,73 RON por un café capuchino, 1,37 RON en un bar por una Coca Cola y 1,58 RON por medio litro de cerveza local. Si prefieres adquirir una cerveza de importación, en un bar pagarás 2,10 RON por una de 33 centilitros.