Salzburgo se localiza al norte de los Alpes, en una antigua ruta muy activa de comercio. Actualmente es un centro cultural muy moderno que impulsa tendencias y creaciones desde el corazón de Europa.
Su relación de eventos culturales por persona es de las más elevadas del mundo, pues cuenta con 150 000 habitantes y organiza más de 4000 acontecimientos culturales al año. Es, asimismo, una de las ciudades barrocas más importantes que existen, con 20 templos de este estilo, como la iglesia de la Santísima Trinidad, la iglesia Franciscana y La Colegiata. De hecho, la UNESCO ha declarado su casco antiguo Patrimonio de la Humanidad.
Además de ser la cuarta ciudad más grande de Austria y haber aparecido en importantes películas, su monumental belleza queda enmarcada por la Fortaleza de Hohensalzburg. La cultura, la arquitectura y sobre todo la música forman parte de Salzburgo, y no solo porque Mozart, uno de los mayores genios de la música clásica, nació en ella.
Kapitelplatz es una de las plazas más bonitas de Salzburgo. Además de unas estupendas vistas de la Fortaleza de Hohensalzburg, te ofrece un ajedrez inmenso en el suelo, afamadas esculturas y, en invierno, un delicioso mercadillo. También la plaza del Mercado Viejo, conocida por los nativos com Alter Markt, ofrece atractivos singulares, entre ellos la antigua farmacia de la corte o el Café Tomaselli.
El centenario Festival de Salzburgo se ha ganado un gran prestigio internacional. Se celebra durante julio y agosto, y cuenta con una estupenda programación de conciertos, ópera y artes escénicas.
Salzburgo alberga las mayores cuevas de hielo del mundo. Para visitarlas deberás viajar 40 minutos en tren o autobús. Si te apetece, puedes disfrutar de una visita guiada de media hora. Pero no olvides llevar tu mejor abrigo, porque las temperaturas bajan de los 0 ºC.
Las minas de sal, que han dado nombre a Salzburgo, protagonizan distintas excursiones atractivas, como la Salzwelten Hallein. Compra tu billete de ida y vuelta en la estación de tren, con el acceso a la mina incluido.
Por delante de la montaña Mönchsberg y coronada por un monasterio de capuchinos, esta colina garantiza una excursión a pie exigente, cuyas panorámicas en la cima lo compensan todo. El atardecer ofrece dos vistas en una: la de día, primero, y la de noche a continuación.
El río Salzach, que en otro tramo actúa como frontera natural entre Alemania y Austria, divide Salzburgo en dos partes diferenciadas: la Ciudad Nueva y la Ciudad Vieja, cuyas calles adoquinadas concentran los lugares más atractivos. La arquitectura barroca de Residenzplatz, la catedral, el museo-palacio Salzburg Residenz y la abadía de San Pedro te invitan a retroceder en el tiempo a cada paso.
Wolfgang Amadeus Mozart es el paisano más famoso de Salzburgo, cuya casa natal se ha convertido en un museo dedicado a su figura, plagado de recuerdos fascinantes, cartas auténticas, habitaciones curiosas y algunos de sus instrumentos. Justo en el exterior se encuentra Getreidegasse, la zona de compras más famosa y moderna de la ciudad.
Fechado en el siglo XI, dominando poderosamente la Ciudad Vieja de Salzburgo, este castillo medieval es uno de los mayores y mejor conservados de Europa. Imaginar los sucesos históricos que albergó, admirar la bella decoración, desde el Salón Dorado hasta la capilla del Arzobispo, y asistir a algún concierto son algunas de sus posibilidades.
El Palacio de Mirabell está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es uno de los lugares legendarios de Austria. Construido a principios del siglo XVII, permanece escoltado por unos impresionantes jardines que te harán sentir como uno de los protagonistas de la mítica película Sonrisas y lágrimas, la cual fue rodada aquí. Por otra parte, el Palacio de Hellbrunn, a unos 5 kilómetros del centro de Salzburgo, es un conjunto monumental renacentista que comenzó siendo una residencia de verano y en el que el príncipe-arzobispo Markus Sittikus diseñó sorprendentes cuevas, figuras y fuentes ocultas de agua que aún se conservan.
La abadía de Nonnberg es un monasterio benedictino que adquirió fama mundial gracias a su novicia María Augusta Kutschera von Trapp, cuya vida inspiró la película Sonrisas y lágrimas. Se trata de un recinto con sabor histórico, artístico y espiritual, que asegura una visita inolvidable.
El río Salzach, que en otro tramo actúa como frontera natural entre Alemania y Austria, divide Salzburgo en dos partes diferenciadas: la Ciudad Nueva y la Ciudad Vieja, cuyas calles adoquinadas concentran los lugares más atractivos. La arquitectura barroca de Residenzplatz, la catedral, el museo-palacio Salzburg Residenz y la abadía de San Pedro te invitan a retroceder en el tiempo a cada paso.
Wolfgang Amadeus Mozart es el paisano más famoso de Salzburgo, cuya casa natal se ha convertido en un museo dedicado a su figura, plagado de recuerdos fascinantes, cartas auténticas, habitaciones curiosas y algunos de sus instrumentos. Justo en el exterior se encuentra Getreidegasse, la zona de compras más famosa y moderna de la ciudad.
Fechado en el siglo XI, dominando poderosamente la Ciudad Vieja de Salzburgo, este castillo medieval es uno de los mayores y mejor conservados de Europa. Imaginar los sucesos históricos que albergó, admirar la bella decoración, desde el Salón Dorado hasta la capilla del Arzobispo, y asistir a algún concierto son algunas de sus posibilidades.
El Palacio de Mirabell está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es uno de los lugares legendarios de Austria. Construido a principios del siglo XVII, permanece escoltado por unos impresionantes jardines que te harán sentir como uno de los protagonistas de la mítica película Sonrisas y lágrimas, la cual fue rodada aquí. Por otra parte, el Palacio de Hellbrunn, a unos 5 kilómetros del centro de Salzburgo, es un conjunto monumental renacentista que comenzó siendo una residencia de verano y en el que el príncipe-arzobispo Markus Sittikus diseñó sorprendentes cuevas, figuras y fuentes ocultas de agua que aún se conservan.
La abadía de Nonnberg es un monasterio benedictino que adquirió fama mundial gracias a su novicia María Augusta Kutschera von Trapp, cuya vida inspiró la película Sonrisas y lágrimas. Se trata de un recinto con sabor histórico, artístico y espiritual, que asegura una visita inolvidable.
Salzburgo es famoso por sus platos austriacos tradicionales que incluyen especialidades como el Schnitzel, un escalope de ternera empanado. El Gasthaus Wilder Mann es un buen restaurante económico que sirve platos clásicos desde 7,00 EUR. Franziskischlössl ofrece magníficas vistas y pescado fino desde 10 EUR. El restaurante K+K es insuperable para celebrar una comida romántica junto a la catedral.
Salzburgo es un destino ideal durante todo el año. En otoño los jardines florecen y, en primavera, las flores de los prados alpinos brillan maravillosamente. Cuando llega el invierno los Alpes son el mejor destino para esquiar y, en verano, los festivales concentran grandes multitudes ansiosas de música y belleza. La temperatura anual de Salzburgo es de unos 8,5 ºC, mientras que en julio y agosto las máximas pueden alcanzar los 25 ºC.
El aeropuerto de Salzburgo (SZG) está perfectamente conectado con numerosas ciudades europeas. Además, el aeropuerto de Múnich se localiza a menos de dos horas en coche y cuenta con tren a Salzburgo. Desde el aeropuerto de Salzburgo, desplázate al centro en trolebús por 2,50 EUR, cuyo recorrido dura unos 20 minutos.
La Ciudad Nueva alberga la estación principal de tren de Salzburgo, que está conectada con numerosas ciudades austriacas y europeas, como Múnich, Zúrich, Zagreb y Budapest. ÖBB Railjet y Westbahn ofrecen desplazamientos desde Viena, de una hora de duración, a partir de 27 EUR.
Llegarás hasta la autopista de Salzburgo desde la A1 de Viena y la A8 de Múnich. Su entorno también cuenta con carreteras regionales atractivas. Si vas a utilizar las autopistas, tendrás que comprar una "viñeta" en las estaciones de servicio o las áreas de descanso de la autopista: es imprescindible para circular por ellas.
Operadores como Czech Shuttle, Eurobusways y Bean Shuttle conectan Salzburgo con Praga, Múnich, Budapest y Viena. Los autobuses generalmente llegan y salen de la estación central de autobuses (Hauptbahnhof) y, por ejemplo, un viaje desde Múnich gestionado por DB, tarda menos de dos horas y cuesta 32 EUR.
1. Altstadt es el casco antiguo y el centro histórico de la ciudad, que alberga la mayoría de las atracciones: la catedral, Residenzplatz, la cinematográfica fuente barroca Residenzbrunnen y Neue Residenz. Además de ser el mayor sitio catalogado como Patrimonio Mundial por la UNESCO, incluye hoteles fastuosos como el Radisson Blu Hotel Altstadt y buenos restaurantes como Gasthaus Zwettler's.
2. Mülln se encuentra al norte del casco antiguo y alberga la hermosa iglesia parroquial de Mülln (Müllner Kirche) y Müllner Bräu, la taberna al aire libre más grande de Austria. Su ambiente rural, hogareño, y su hermosa arquitectura lo convierten en un destino imprescindible.
Maxglan es el distrito residencial por excelencia de Salzburgo, muy demandado para vivir. Es un buen lugar para comprar y permite llegar al Altstadt andando entre boutiques y tiendas de lujo. Entre sus atractivos turísticos figuran la parroquia de San Maximiliano y Hangar-7, un edificio que acoge la colección de aviones privados de Dietrich Mateschitz, el dueño de Red Bull.
Los trolebuses y autobuses públicos están disponibles en Salzburgo desde 2,60 EUR el billete sencillo y 5,70 EUR el bono de 24 horas. Además, la línea local de tren conecta con Lamprechtshausen y Oberndorf bei Salzburg.
Los taxis en Salzburgo son fiables y puedes pararlos a pie de calle. La bajada de bandera está fijada en 3,60 EUR y, seguidamente, pagarás alrededor de 1,70 EUR por cada 1,6 kilómetros recorridos.
Piénsatelo dos veces antes de conducir por Salzburgo. Sus señales de tráfico no siempre te resultarán legibles y es obligatorio llevar llantas de nieve entre octubre y abril, así como cadenas apropiadas cuando nieva. Avis y Sixt son las principales sucursales de alquiler de coches de Salzburgo, que ofrecen coches desde 80 EUR diarios.
Comprar en las hermosas calles de Salzburgo puede ser un verdadero placer. La calle comercial más famosa es Getreidegasse, una elegante avenida que ofrece tiendas exclusivas y comercios de accesorios de moda, antigüedades, artículos de cuero y papel, perfumerías y la cerrajería tradicional Schlosserei Wieber. Linzer Gasse es otro buen lugar para encontrar boutiques de moda y zapaterías.
Entre las muchas cadenas de supermercados de Salzburgo figuran Spar, Billa e INTERSPAR. Hay un gran centro comercial, el FORUM 1, justo detrás de la estación de tren. Medio litro de cerveza nacional te saldrá por 0,87 EUR y una lata de 33 centilitros de cerveza de importación por 1,90 EUR.