Nueva Orleans es única. Situada en la desembocadura del Misisipi, es el hogar del jazz y el blues, la cocina cajún y los espectaculares colores y desfiles de Mardi Gras, el carnaval de Nueva Orleans. Si te gusta la diversión desenfadada, no hay mejor destino.
Pasa la tarde yendo de un bar a otro en Bourbon o Frenchmen Street, y disfruta de algunos de los músicos más talentosos de Estados Unidos. Dirígete al vecindario de Tremé para ver cómo las bandas de blues iluminan los clubes locales, o admira a los artistas callejeros en Jackson Square.
Si te gusta comer bien, puedes deleitarte con el marisco gourmet en Acme Oyster House y regarlo con un cóctel de Sazerac en el Carousel Bar, o pasar por Willie Mae's Scotch House para regalarte una auténtica comida sureña.
Mardi Gras es un festival callejero mundialmente popular por su energía, su color y su buen ambiente. Incluye mucha marcha, música en vivo, deslumbrantes desfiles y fiestas durante toda la noche. Tiene lugar a finales de febrero o principios de marzo, según cada año.
Muchas personas visitan Nueva Orleans por una sola razón: escuchar música en el lugar donde nació el jazz. Cualquier noche de la semana se programan exhibiciones de virtuosos músicos de jazz y blues en lugares como Spotted Cat o Snug Harbor Jazz Bistro.
Según los estándares estadounidenses, Nueva Orleans es antigua, pues se fundó en 1718. Su rica historia de dominio francés, español y estadounidense ha dejado un legado de edificios extraordinarios. Pasea por la calle Bourbon, visita el Cabildo o la belleza de ladrillo rojo de los edificios de Pontalba.
La cocina cajún es otra aportación global de la que Nueva Orleans se enorgullece. Durante tu visita, date un festín de jambalaya (una suerte de paella) en Gumbo Shop o de cangrejos frescos en Bevi Seafood Co. Cuando Mardi Gras está en su máximo esplendor, no te pierdas el espectacular pastel king en Willa Jean.
A Nueva Orleans no le gusta dormir, pues es uno de los principales destinos de vida nocturna de Estados Unidos. Puedes escuchar veinte bandas por noche en Bourbon Street, jugar en el Harrah's Casino New Orleans o sumergirte en clubes de baile nocturnos como The Beach on Bourbon.
La parte más antigua de Nueva Orleans es el Barrio Francés, que está considerado el alma de la ciudad. Bourbon Street es su calle más famosa, llena de bares y clubes que otorgan a la ciudad su salvaje reputación. Originalmente popular como escenario de jazz, Preservation Hall sigue descubriendo el talento local en un ambiente genuino. Las vibraciones continúan fuera de la catedral de St. Louis, en Jackson Square, donde siempre hay una actuación callejera para disfrutar.
Las experiencias más auténticas de Nueva Orleans te esperan en la calle Frenchmen, que incluye lugares de música tan populares como The Spotted Cat Music Club y The Maison. Creole Cottage se alinea en las calles de este distrito de entretenimiento, representativo del estilo más auténtico de Nueva Orleans.
El City Park es el área más verde de Nueva Orleans. Un oasis urbano con flora y fauna locales distribuidas por un laberinto de caminos y vías fluviales bellamente diseñados. El Museo de Arte de Nueva Orleans e innumerables actividades recreativas atraen a nativos y turistas de todas partes.
Este museo militar destaca el papel de la intervención de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial. En Nueva Orleans se diseñaron y construyeron los barcos Higgins, los cuales fueron utilizados en Normandía y luego en las invasiones de la guerra del Pacífico. El museo cuenta con un teatro 4D y una exhibición submarina interactiva.
Nueva Orleans es una ciudad con muchas caras que muestra en el distrito de los Jardines sus matices más sureños. La riqueza de las mansiones históricas son fascinantes y el contraste con el resto de la ciudad refleja un duro pasado de segregación. Ahora entre los habitantes ilustres de estas mansiones figuran Peyton Manning, Beyoncé, Jay Z y John Goodman.
La parte más antigua de Nueva Orleans es el Barrio Francés, que está considerado el alma de la ciudad. Bourbon Street es su calle más famosa, llena de bares y clubes que otorgan a la ciudad su salvaje reputación. Originalmente popular como escenario de jazz, Preservation Hall sigue descubriendo el talento local en un ambiente genuino. Las vibraciones continúan fuera de la catedral de St. Louis, en Jackson Square, donde siempre hay una actuación callejera para disfrutar.
Las experiencias más auténticas de Nueva Orleans te esperan en la calle Frenchmen, que incluye lugares de música tan populares como The Spotted Cat Music Club y The Maison. Creole Cottage se alinea en las calles de este distrito de entretenimiento, representativo del estilo más auténtico de Nueva Orleans.
El City Park es el área más verde de Nueva Orleans. Un oasis urbano con flora y fauna locales distribuidas por un laberinto de caminos y vías fluviales bellamente diseñados. El Museo de Arte de Nueva Orleans e innumerables actividades recreativas atraen a nativos y turistas de todas partes.
Este museo militar destaca el papel de la intervención de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial. En Nueva Orleans se diseñaron y construyeron los barcos Higgins, los cuales fueron utilizados en Normandía y luego en las invasiones de la guerra del Pacífico. El museo cuenta con un teatro 4D y una exhibición submarina interactiva.
Nueva Orleans es una ciudad con muchas caras que muestra en el distrito de los Jardines sus matices más sureños. La riqueza de las mansiones históricas son fascinantes y el contraste con el resto de la ciudad refleja un duro pasado de segregación. Ahora entre los habitantes ilustres de estas mansiones figuran Peyton Manning, Beyoncé, Jay Z y John Goodman.
La comida es como una religión en Nueva Orleans: los buenos restaurantes se concentran por todas partes. Magazine Street y el Barrio Francés son las mejores áreas para comer. Para probar comidas tradicionales criollas y bocadillos para picar, Joey K's Restaurant & Bar es perfecto. Si te apetece la cocina criolla con un toque español, Root y Restaurant August, que sirve excelentes mariscos, son deliciosos. Si prefieres probar algo distinto, la taquería mexicana Felipe es tan buena como Company Burger para saborear deliciosas hamburguesas económicas. Reserva unos $ 40 para una buena comida y menos de $ 15 para hamburguesas.
La celebración del Mardi Gras es un gran momento para visitar Nueva Orleans. La ciudad suele ser bastante calurosa en julio y agosto, por lo que febrero y mayo son mejores meses, ya que además se celebra el New Orleans Jazz & Heritage Festival. La Navidad también resulta maravillosa. La temperatura promedio es de 20,3 ºC.
El aeropuerto internacional Louis Armstrong, situado a unos 11 kilómetros al oeste, es el punto de entrada más popular. Una vez allí, toma un taxi por $ 35 para ir al centro, o usa el autobús Jefferson Transit Airport Express, que cuesta $ 2 y tarda tres cuartos de hora.
La Terminal de Pasajeros de la Unión de Nueva Orleans incluye una estación de Amtrak, y tres servicios diferentes se detienen allí procedentes desde Chicago, Nueva York y California. El viaje desde la Gran Manzana, que dura unas 30 horas, cuesta $ 132,79.
La mayoría de los conductores que vienen del aeropuerto o de otras ciudades utilizan la carretera interestatal 10, que conecta Nueva Orleans con ambas costas estadounidenses. Las autopistas interestatales 55 y 59 la comunican con los destinos del norte, mientras que si conduces de Luisiana debes tomar la interestatal 49 y cambiar a la interestatal 10 en Lafayette.
Nueva Orleans está bien enlazada con otras ciudades mediante autobús, gracias a empresas como Greyhound, Megabus y NORTA. El viaje desde Nueva York, gestionado por Greyhound, vale entre $ 86 y $ 203.
1. El Barrio Francés es el distrito más famoso de Nueva Orleans, así como el epicentro de la vida nocturna y gastronómica. Pasea de noche por Bourbon Street y de día por Royal Street, acude a Jackson Square y visita la catedral de St. Louis.
2. Faubourg Marigny es un hervidero musical con artistas excelentes. Visita las casas criollas y pásate de noche por Frenchmen Street, donde bares como el Nilo Azul y d.b.a. son fabulosos.
3. Tremé es una de las comunidades afroamericanas más antiguas del país. Descubre su rica historia en el Museo Cultural Backstreet, visita el parque Louis Armstrong y no te pierdas los espectáculos de música clásica y jazz en el Teatro de Artes Escénicas Mahalia Jackson.
Caminar y usar el transporte público en Nueva Orleans son buenas opciones. La red de tranvías tiene una tarifa única de $ 1,25, aunque adquirir un Jazzy Pass, que puede funcionar por 1, 3 o 31 días y vale $ 3, $ 9 y $ 55, respectivamente, sale mejor de precio.
Los taxis no resultan muy útiles en Nueva Orleans, aunque pueden ser la única forma de regresar a tu hotel después de medianoche. La bajada de bandera asciende a $ 3,50 y, después, se pagan $ 2 por cada 3 kilómetros o $ 0,25 por cada 40 segundos de espera. También se abona $ 1 por cada cliente.
Conducir en Nueva Orleans resulta complicado. Si necesitas un coche, recógelo en las agencias de alquiler del aeropuerto, como Avis, Enterprise, Thrifty y Budget, desde $ 25 al día, para ahorrar dinero.
Magazine Street es el centro comercial de Nueva Orleans, con boutiques de antigüedades, productos alimenticios y ropa. No te pierdas los cosméticos de Pied Nu, la elegante papelería Box Paper Scissors ni la ropa masculina de diseño de Friend. Canal Place es ideal para comprar marcas importantes, en tiendas como Saks Fifth Avenue y Anthropologie. El vibrante mercado francés, con su mercadillo y sus puestos de agricultores, ofrece una experiencia envolvente.
Los principales supermercados de Nueva Orleans son Safeway, Kmart, Winn-Dixie y Costco, aunque también hay supermercados locales. Esta ciudad tiende a ser más barata que la mayoría de las estadounidenses: así, por ejemplo, 12 huevos cuestan alrededor de $ 2,70; y una cerveza local de medio litro, $ 1,90.