Ajetreada, hermosa y situada a una razonable distancia de las playas de la Costa Maya, Mérida es el centro de Yucatán y uno de los destinos más gratificantes de México. Su centro histórico cuenta con cinco siglos de historia que se aprecian en sus encantadores templos, construcciones y palacios, pero también con avenidas modernas y dinámicas, como el paseo de Montejo, cuyo diseño se inspiró en los Campos Elíseos de París.
Desde su fundación en 1542, Mérida ha sido una joya de la corona colonial española. En su casco antiguo, en una plaza tras otra se acumulan las iglesias majestuosas, las fuentes y los rincones que parecen sacados del siglo XVII. Por otra parte, también incluye multitud de museos, como el de la Ciudad de Mérida, el Gran Museo del Mundo Maya y el excelente Museo de Arte Contemporáneo, así como numerosos bares y música en vivo en las zonas céntricas.
Este excepcional destino urbano se convierte, por ello, en un campamento base ideal desde el que explorar las ciudades mayas de Yucatán, el cual ofrece vivencias y experiencias autóctonas tan singulares como comprar sombreros y guayaberas, saborear marquesitas de queso de bola o animar a los equipos locales de béisbol (los Leones de Yucatán) y fútbol (los Venados).
Conocida como la "Ciudad Blanca" por la proliferación de edificios coloniales de mármol y piedra caliza, Mérida es una fiesta arquitectónica. Empieza a explorarla por la plaza Grande y continúa por las mansiones del paseo de Montejo y sus grandes edificios, como el Palacio Cantón.
Situado en el paseo de Montejo, el imponente Monumento a la Patria rinde tributo a los momentos más destacados de la historia de México en general y de Yucatán, en particular.
Los mayas desarrollaron una deslumbrante cultura urbana antes de la llegada de los conquistadores españoles. La ubicación de Mérida es ideal para visitar enclaves próximos como la Zona Arqueológica de Oxkintok, y su complejo laberíntico, Izamal y Dzibilchaltún.
Recorre el enorme mercado Lucas de Gálvez antes de echar un vistazo a especialidades yucatecas como el Poc Chuc (cerdo a la parrilla al estilo maya) y los papadzules (tacos de huevo cocidos en una deliciosa salsa de semillas de calabaza).
Otra de las ventajas de Mérida es su cercanía a algunas de las playas mexicanas más atractivas. Así, Progreso, sus zonas de baño y sus restaurantes de marisco se encuentran a media hora en coche. Los apacibles pueblos de pescadores, como Río Lagartos, ofrecen tramos de arena casi desiertos y son también un destino memorable.
Este parque localizado en el corazón de Mérida, junto a la Casa de Cultura Banamex y a la catedral de Mérida, incluye bancos a la sombra y senderos muy estimulantes. Por su ubicación y sus características, es ideal para probar la auténtica comida local y relajarse mientras se observa a los nativos. Se trata de un lugar plagado de joyas históricas y construcciones únicas, que alberga numerosas actuaciones de danza y música.
La catedral de San Ildefonso es una de las iglesias más antiguas de América. Católica, romana y construida en el siglo XVI sobre las ruinas mayas de Tihó, cuenta con una bonita leyenda que asegura que su famosa estatua del Cristo de las Ampollas fue tallada por un rayo al alcanzar un árbol, el cual se quemó durante toda una noche sin deteriorarse, antes de mostrar esta talla.
Viajar a México exige rendir tributo a los mayas. El Gran Museo del Mundo Maya presenta obras de arte y artesanías históricas, capaces de enseñar a los visitantes las costumbres mayas y su vida cotidiana. Exteriormente parece una bola gigante de bandas elásticas, pero en realidad fue diseñado para parecerse a un árbol sagrado maya que, según se creía, conectaba al mundo vivo con los cielos y el mundo subterráneo. No te pierdas el espectáculo de luces y sonido que se ofrece de forma gratuita cada noche.
Disfrutar al aire libre del sol y de la vegetación tropical es, en Yucatán, una delicia. El parque Hidalgo, ubicado en Coyoacán, recibe su nombre en honor del sacerdote y nacionalista Miguel Hidalgo, gran protagonista en la Guerra de la Independencia de México. El área está bellamente ajardinada, con césped bien cuidado, arreglos florales y senderos sombreados que invitan a la relajación. En los días despejados, es posible visitar el volcán Tacaná.
Mérida posee una naturaleza cosmopolita y cultural que se aprecia, sobre todo, en sus magníficos espacios museísticos, como el Museo Fernando García Ponce-MACAY, cuyo acceso es gratuito y su finalidad consiste en difundir el arte moderno mexicano, por ejemplo de creadores como Fernando Castro Pacheco y Gabriel Ramírez Aznar.
Este parque localizado en el corazón de Mérida, junto a la Casa de Cultura Banamex y a la catedral de Mérida, incluye bancos a la sombra y senderos muy estimulantes. Por su ubicación y sus características, es ideal para probar la auténtica comida local y relajarse mientras se observa a los nativos. Se trata de un lugar plagado de joyas históricas y construcciones únicas, que alberga numerosas actuaciones de danza y música.
La catedral de San Ildefonso es una de las iglesias más antiguas de América. Católica, romana y construida en el siglo XVI sobre las ruinas mayas de Tihó, cuenta con una bonita leyenda que asegura que su famosa estatua del Cristo de las Ampollas fue tallada por un rayo al alcanzar un árbol, el cual se quemó durante toda una noche sin deteriorarse, antes de mostrar esta talla.
Viajar a México exige rendir tributo a los mayas. El Gran Museo del Mundo Maya presenta obras de arte y artesanías históricas, capaces de enseñar a los visitantes las costumbres mayas y su vida cotidiana. Exteriormente parece una bola gigante de bandas elásticas, pero en realidad fue diseñado para parecerse a un árbol sagrado maya que, según se creía, conectaba al mundo vivo con los cielos y el mundo subterráneo. No te pierdas el espectáculo de luces y sonido que se ofrece de forma gratuita cada noche.
Disfrutar al aire libre del sol y de la vegetación tropical es, en Yucatán, una delicia. El parque Hidalgo, ubicado en Coyoacán, recibe su nombre en honor del sacerdote y nacionalista Miguel Hidalgo, gran protagonista en la Guerra de la Independencia de México. El área está bellamente ajardinada, con césped bien cuidado, arreglos florales y senderos sombreados que invitan a la relajación. En los días despejados, es posible visitar el volcán Tacaná.
Mérida posee una naturaleza cosmopolita y cultural que se aprecia, sobre todo, en sus magníficos espacios museísticos, como el Museo Fernando García Ponce-MACAY, cuyo acceso es gratuito y su finalidad consiste en difundir el arte moderno mexicano, por ejemplo de creadores como Fernando Castro Pacheco y Gabriel Ramírez Aznar.
La comida yucateca es muy diferente de la gastronomía mexicana convencional, pues incluye platos de cerdo asados a fuego lento y tacos de huevo en salsa de semillas de calabaza, entre otras delicias. Manjar Blanco es una buena referencia de restauración, mientras que los tacos de Wayan'e y las pizzas de El Trapiche resultan estupendos. Por último, a la hora del postre, pásate por Dulcería y Sorbetería Colón. Los precios de las comidas se sitúan alrededor de los Mex$ 100 por persona.
Mérida es un destino tropical, por lo que el invierno es un excelente momento para visitarla. Entre septiembre y mayo cuenta con temperaturas cálidas y escasa humedad, mientras que el verano es mucho más húmedo y las tormentas tropicales son más frecuentes. La temperatura promedio anual es de 22,7 ºC.
El aeropuerto internacional Manuel Crescencio Rejón (MID) está a unos 8 kilómetros al sur del centro de la ciudad y cuenta con vuelos regulares internacionales, en especial a Estados Unidos. La mejor manera de llegar a la ciudad es utilizar un taxi o un autobús de enlace, lo que te costará alrededor Mex$ 200.
Dado que se encuentra en la punta de la península de Yucatán, Mérida no supone un desplazamiento cómodo en automóvil desde Ciudad de México. Deberás tomar la autopista 150D hacia La Tinaja, luego cambiar a la 145D y después a la autopista 180, en Coatzacoalcos, donde deberás seguir el camino hasta la costa de Mérida. Si conduces desde Cancún, el viaje es mucho más corto: tendrás que tomar la autopista 180 en dirección oeste.
Mérida tiene dos estaciones de autobuses. La principal se llama CAME, está en la calle 70, es gestionada por ADO y OCC y recibe rutas procedentes de localidades como Ciudad de México, Campeche o Veracruz. La otra es la estación de autobuses de segunda clase, ubicada en la calle 69, que gestiona rutas regionales. Un viaje desde Ciudad de México a Mérida, que dura más de 20 horas, vale Mex$ 1898.
1. El centro histórico se ubica alrededor de la plaza Grande e incluye arquitectura hermosa, museos, tiendas, la espléndida catedral y la Casa de Montejo.
2. San Sebastián es un pueblo maya adormecido, anterior a Mérida, que conserva un ambiente íntimo. Su hermoso santuario de Santa Isabel es su encanto más impactante.
3. La Mejorada, que se localiza al este del centro histórico, es más que un simple barrio colonial. Solía ser el centro ferroviario de Mérida, antes de que se cerrara la estación, y ahora acoge el fascinante Museo del Ferrocarril de Yucatán y excelentes restaurantes, como Los Almendros.
Caminar es la mejor manera de disfrutar del centro y, además, Mérida dispone de un patrón urbanístico de cuadrícula fácil de recorrer. El transporte público no es demasiado bueno, aunque existe un sistema de autobuses con billetes que cuestan unos Mex$ 7.
Pedir al conserje de tu hotel que te reserve un taxi es una buena opción, ya que sus tarifas son muy razonables. Lo normal es pagar unos Mex$ 20 por la bajada de bandera y, seguidamente, unos Mex$ 25 por cada 1,6 kilómetros recorridos. El cargo de espera se cifra en Mex$ 150 por hora.
Alquilar un coche es una buena decisión, sobre todo para desplazarse a la playa y a las ruinas mayas. Alamo y Europcar cuentan con oficinas céntricas, con tarifas tan bajas que parten de los Mex$ 100 por día.
La calle comercial más emocionante de Mérida es el paseo de Montejo, que incluye tiendas de ropa como Yapurlandia, Morana fashion store y Guayaberas Ravgo, lugares para saborear un chocolate caliente como Ki Xocolatl y abundantes tiendas departamentales. La ciudad también cuenta con mercados bulliciosos, como el mercado Lucas de Gálvez.
Mérida dispone de una gran selección de supermercados, entre ellos Walmart, Súper Akí y Superama. Lo habitual es pagar Mex$ 28 por una docena de huevos. Una cerveza en un bar, por otra parte, te costará Mex$ 475,15.